Emilio Márquez Espino es un emprendedor experto en conectar empresas y profesionales en el Club de negocios y debates La Latina Valley en Madrid y Barcelona. Además es Business Angel y Youtuber sobre economía digital en emilio.tv. Hasta el pasado año, otra de sus aportaciones al mundo emprendedor fue como profesor de Google Actívate, impartiendo cursos en diferentes universidades españolas sobre marketing digital.
Conozcamos un poco más a Emilio:
¿Cómo explicarías lo que hace La Latina Valley a un inexperto en el área?
La Latina Valley es un club de debates y de negocios en español, en este momento con eventos virtuales para realizar nuestra principal misión, que es conectar profesionales y empresas.
¿Qué virtud crees que debe de explotar La Latina Valley y que lo hace único?
Nuestra principal virtud es que nuestros participantes aporten experiencias, conocimientos y soluciones de negocio a otros participantes de la comunidad. El abierto intercambio de experiencias entre participantes es nuestra gran baza, con la intención de ayudar a profesionales gracias al enriquecimiento de las experiencias del sector. Además, la digitalización nos ha permitido ir adaptando La Latina Valley a todas las circunstancias que han venido en la actualidad.
¿Qué importancia tiene el networking en un proyecto emprendedor?
El networking es vital para un emprendedor y para los proyectos que nacen desde cero. Las relaciones son fundamentales para encontrar inversores, socios y reclutar talento. Generar una red de contactos es muy importante para enriquecerse también de las experiencias de los profesionales de nuestro sector. Siempre hay que aprender, y escuchar y aportar tu visión con el networking es algo muy favorecedor.
¿Cómo se ha adaptado La Latina Valley a la nueva situación? ¿Ha sido tu momento más difícil con el proyecto?
Nos hemos adaptado con el proyecto de La Latina Valley VIrtual, adaptando los eventos presenciales, tanto afterworks como debates, al método online. Los encuentros entre los profesionales de nuestro club se han seguido realizando con la misma temporalidad y ha sido un éxito. Ha sido un momento de transición y cambio y como todos es difícil, pero es vital reaccionar a tiempo para seguir adelante. Hemos crecido incluso derribando fronteras y ampliando nuestro negocio a latinoamérica con debates y encuentros en todo el mundo hispanohablante.
¿Has tenido algún fracaso o error grave como emprendedor? ¿Qué aprendiste de él?
Si, he cometido errores como emprendedor. Comencé en los años noventa desarrollando modelos de negocio en Internet y hasta llegar hasta aquí he pasado por muchas fases. Ser emprendedor es bonito, pero no debemos olvidar que también es arriesgado. Los errores no son fáciles de admitir, pero ayudan a mejorar. En España la cultura del fracaso es muy dura y no se suele hablar abiertamente de los errores. Hay que testar los modelos de negocio y algún error he cometido en mi carrera debido a ello. Otros de los errores ha sido no llegar al mercado en el momento oportuno, o muy pronto o muy tarde, o depender solo de un cliente.
Un emprendedor al que admires ¿Por qué?
Personalmente podría tener varios en los que inspirarme y seguir sus pasos, pero lo cierto es que no hay uno único porque casi todos los grandes emprendedores con carreras gloriosas siempre tienen épocas de claroscuro. Tenemos ejemplos muy famosos como Steve Jobs o Elon Musk. Hay grandes figuras, pero no hay que tener solo uno como inspiración, ni toda su vida es tan luminosa.
¿Qué virtud debe explotar el emprendimiento español?
Tiene que tener muchas porque para emprender no vale solo con una. La resiliencia para soportar las presiones del mercado, saber vivir con el cambio presente, para adaptarse a un mundo cada vez más digital, la honestidad, la empatía y ante todo capacidad para crear equipo y una comunidad fluida. Cada vez los equipos de trabajo están más deslocalizados y la importancia de aunar a los trabajadores es muy importante.
¿Cómo de importante es que un fundador sea a la vez un buen orador?
Es vital. El CEO no es solo estar sentado en un despacho, cada vez es más la cabeza visible y tiene que representar a la empresa y sus valores. Los congresos son una gran oportunidad y en el entorno laboral también es muy importante. Es imprescindible que sea un buen orador para transmitir a su equipo lo que quiere conseguir y donde se quiere llegar. Si transmites esa confianza y ambición a tu equipo de forma correcta el éxito está más cerca.
