Luis Bardají es CEO y cofundador de Trucksters. Junto a Ramón Castro y Gabor Balogh, lidera una de las startups de logística que más ilusiona en España (y en Europa).

Hace apenas unas semanas anunciaban el segundo tramo de una Serie A de €14,3M en la que no han faltado inversores con ganas de unirse a la fiesta. Ha tenido la particularidad de ser una ronda de dos tramos. Uno de €6,3M en julio de 2021 y otro de €8M hace unas semanas.

Entre muchos de sus inversores destacan VCs como Kibo Ventures, Amplifier, APX, Bonsai Partners, Big Sur Ventures (BSV), Metavallon VC y The Valley VC. Además, hay grandes nombres propios como Sacha Michaud (Glovo) que se unió como presidente no ejecutivo, Juan Urdiales y Felipe Navio (Jobandtalent) o Telmo Pérez (Acciona).

Más allá de inversión y cifras que ocupan titulares, Trucksters tiene una gran misión por delante: optimizar el transporte por carretera de larga distancia, haciéndolo más humano, más ecológico y más eficiente. Hemos tenido la suerte de hablar sobre esta misión, sus comienzos y la visión de futuro de Luis y Trucksters.

Conozcamos un poco más a Luis:

¿Cómo explicarías lo que hace Trucksters a quien aún no lo conozca?

En Trucksters ofrecemos un servicio de transporte de mercancías basado en relevos de conductores y tecnología. Gracias a nuestro modelo, permitimos que la mercancía tarde la mitad en llegar a su destino, algo vital hoy en día con el auge del e-commerce, y a la vez conseguimos que los conductores duerman en su casa más veces, algo fundamental por la escasez de profesionales que vive el sector. 

¿Qué hace único a Trucksters?

En Trucksters hacemos algo fácil de visualizar: implementar un sistema de postas / relevos que optimiza todo el sistema. La idea en sí misma no es nueva, y de hecho se aplica en sectores como el aeronáutico. Sin embargo, en el sector de transporte de mercancías esto era una excepción, derivada de la gran fragmentación del mercado, con transportistas entre 2 y 3 camiones de media.

Cuando empezamos nos encontramos con una industria muy tradicional y muy fragmentada, y para montar un sistema como el nuestro se necesita escala y tecnología. Por un lado, la escala la conseguimos gracias a trabajar con cientos de clientes y transportistas. Por otro lado, la tecnología la aportamos con un equipo propio puntero tanto en desarrollo de software como en diseño de algoritmos. ¿Qué nos hace únicos? Parece una obviedad, pero las empresas no somos más que personas. Y si algo nos hace único creo que son las personas.

Contamos con una combinación de, por un lado, profesionales del sector de camiones que conocen bien la problemática y, por otro lado, haber contratado a los mejores en tecnología y programación. Cuando contratas los mejores se produce un efecto llamada, y mientras otras empresas tienen problemas de contratación en tecnología, a nosotros, a día de hoy, nos llueven los currículums. Y eso es vital para el funcionamiento de una startup tecnológica.

¿Cómo fueron los primeros días de Trucksters? ¿Cómo se formó el equipo fundador?

Los primeros días fueron muy divertidos, aunque quizás pecamos de algunas maneras de hacer las cosas que adquirimos en nuestros anteriores trabajos. Trucksters lo fundamos tres consultores estratégicos que nos conocíamos de haber trabajado juntos anteriormente. Como típicos consultores, antes de hacer nada, estuvimos meses investigando, hablando con conductores, transportistas, haciendo planes de negocio, estimando tamaño de mercado…

Ese análisis es fundamental, pero quizás podríamos haberlo acelerado mucho con lo que hemos aprendido posteriormente: la clave es ejecutar y hacer que las cosas pasen.

¿Cómo te aseguras de que, a medida que crece el equipo, los valores y visión siguen alineados?

Creo que la clave es tener la capacidad de atraer talento y que ese talento se alinee al máximo con los valores y la visión. Hay empresas que dicen tener cultura de «Ambición e impacto» pero luego fichan a gente que lo que quiere es seguridad y no correr riesgos. Por mucha formación que hagas, o por muchos onboardings que implementes, es muy difícil cambiar a la gente, y en una startup no hay tiempo para ello. Hay que fichar a la gente que sea «plug and play». La cultura la forman la gente que fichas y que retienes.

¿Por qué decidiste lanzarte a emprender?

Creo que no hay nada más bonito que montar un equipo que tiene las ideas claras y que trabaja para hacer algo grande y que genere un impacto positivo. Esa combinación, de equipo y de visión, es lo que nos hace levantarnos todos los días y dar más del 200%. La oportunidad de tener la libertad de montar un equipo con este objetivo no sólo está cuando emprendes en una nueva startup, también se da en las corporaciones. Pero generalmente eso es más difícil de conseguir.

Si volvieras a fundar Trucksters, con tus conocimientos actuales. ¿Qué hubieras hecho diferente?

Sin duda, habría hecho todo lo posible para fichar más gente buena al principio. La gente buena sale barata a medio plazo.

Un emprendedor al que admires ¿Por qué?

Internacionalemente sigo mucho a Elon Musk, que tiene una ambición por cambiar industrias tradicionales que contagia. Sin embargo, me gusta fijarme en personas a las que puedo conocer y aprender de una manera más cercana.

En ese sentido, creo que en España tenemos emprendedores extraordinarios, y ahora mismo me viene a la cabeza 3 de estos emprendedores: Gonzalo Úrculo, de Crowdfarming, Sacha Michaud y Oscar Pierre, de Glovo. He tenido la oportunidad de conocerles y todos tienen el mismo patrón: quieren crear impacto positivo construyendo modelos gracias a la tecnología. Tienen una capacidad de transmitir esa visión de una manera extraordinaria.

¿Cómo te ves a ti mismo y a Trucksters en 5 años?

Me encantaría seguir en Trucksters, construyendo el futuro del long-haul, implementando relevos, electrificando las rutas de largas distancias y acelerando la implementación de camiones autónomos, un mundo en el que Europa va muy por detrás y tenemos que ponernos al día.