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Marc Rovira | Polaroo | «El 84% de la gente tiene gastos que ni recuerda»

Cuando Marc Rovira cofundó Polaroo junto a su hermano David y Sergio Sánchez en 2017, tenía un objetivo muy claro: ahorrar tiempo y dinero al cliente, consiguiendo que pague una sola factura al final del mes. Sin duda, algo muy atractivo y desafiante por partes iguales. Marc es el CEO de esta startup catalana que consiguió la proeza de cerrar una ronda de financiación de 1 millón de euros en pleno confinamiento. Esto es muestra de que, cuando tienes una idea de éxito, apoyada en un gran equipo, cualquier situación es superable. Tras ello, han ampliado el equipo y se encuentran mejorando el producto para ayudar tanto a empresas como autónomos y particulares, controlando y reduciendo sus gastos. Sin embargo, hasta llegar a este punto donde Polaroo se encuentra en pleno despegue, el trabajo de todo el equipo, liderado por Marc, ha sido más que notable.

En los momentos más críticos, durante el confinamiento, Polaroo aportó su granito de arena, ofreciendo sus servicios de forma gratuita a autónomos, pymes y consumidores. Esta decisión fue tomada nada más iniciarse el estado de alarma y, sin duda, ha sido de gran ayuda para muchos y lo seguirá siendo a medida que vaya creciendo su número de usuarios. En plena era de la digitalización y en momentos donde cada euro puede ser clave para el devenir de las finanzas personales o de cualquier profesional, Polaroo se sitúa como un actor clave a tener en cuenta. Como nos comenta Marc, puede ser difícil ser consciente de todos los pagos a los que nos enfrentamos a final de mes y más aún conocer si estamos minimizándolos. Una app como Polaroo es más que interesante si valoramos nuestro tiempo y, sobre todo, nuestro dinero.

Conozcamos un poco más a Marc:

¿Cómo explicarías lo que hace Polaroo a un inexperto en el área?


Polaroo es una app que te permite controlar todas tus suscripciones. El 84% de la gente tiene gastos que ni recuerda. Nosotros te los encontramos, te ayudamos a cancelarlos, a cambiarlos y a reducirlos. Polaroo te devuelve el control del dinero para que pagues menos y vivas mejor.

¿Cuál ha sido la situación más difícil en la que te has encontrado en Polaroo?


El lanzamiento de la primera versión. El diseño del modelo de negocio. El balancear el crecimiento del equipo con la eficiencia, etc Y así en cada etapa. La situación más difícil está siempre por llegar. Siempre hay algo inesperado acechando. La clave es tener un equipo y una cultura que te permita detectar, aprender y adaptar lo mas rápido posible.

¿Qué cambiarías si volvieras a fundar Polaroo?


En retrospectiva todo siempre es más fácil. Pero no pienso en lo que cambiaría ya que no puedo cambiarlo. Estamos dónde estamos gracias a todo lo que hemos hecho (lo bien y lo no tan bien). Creo que lo importante es no darle vueltas a la cosas. Como dice Hamlet «Thus conscience does make cowards of us all» (Act 3 Scene 1). Lo importante es actuar a conciencia, ser autocrítico, aprender y mejorar. 

Un emprendedor al que admires ¿Por qué?


Todos. Esto no es fácil, para nada. Cada uno tiene su historia, pero la resiliencia, visión y energía es un factor común. Es como ser director de una orquesta donde no hay partitura y donde solo tu y tus socios sabéis la emoción que quieres transmitir. Además tienes que ir definiendo los instrumentos, el estilo musical, la partitura a medida que vas vendiendo tickets de tu concierto a un público que no sabe qué harás, mientras también convences a unos inversores para que te ayuden a montar un show espectacular y fichas a unos músicos para que te ayuden a crear la música. Vamos que esto es muy jodido. hahaha

¿Cuál fue tu primer fracaso como emprendedor? ¿Qué aprendiste de él?


Creo que la palabra «fracaso» en el entorno de startups está perjudicando muchísimo. Yo no considero un fracaso el que lo intenta y no lo consigue, esto es muy español: el decir «he/has fracasado». El fracaso es el que quiere y no lo hace por miedo. Competir en una carrera y no acabar no es fracasar: como mínimo le has echado un par y lo has intentado, cosa que muchos solo sueñan con ello. Lo que sí que he hecho y he aprendido es la importancia del timing. Monté una startup cuando no había mercado para ello: fue en 2013 con un proyecto de analítica para aparatos domóticos.

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