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Microfinanzas | Cómo los microcréditos pueden generar impacto social y rentabilidad

Puede que la primera vez que la comunidad global escuchara el término «microfinanzas» fuese tras el Premio Nobel de la Paz que recibió Muhammad Yunus en 2006. Desde entonces, los microcréditos han estado teniendo un papel clave en numerosos entornos, donde el acceso al crédito es algo limitado.

Como aspectos indudablemente positivos, los microcréditos han dado acceso a pequeños préstamos a personas sin recursos, muchas veces sin acceso a una cuenta bancaria y sin historial crediticio. De esta forma, aquellas personas que antiguamente se encontraban excluidas del sistema financiero, hoy en día pueden tener acceso a este y hacer sus sueños realidad. ¿Podemos imaginar un sistema productivo sin créditos?

El centro de la crítica es que las condiciones al otorgar un crédito son mucho menos beneficiosas si es recibido por alguien sin recursos que si es recibido por un individuo solvente, sobretodo en comunidades remotas donde existe la figura del usurero. Los microcréditos buscan ofrecer préstamos seguros en lugares más o menos remotos en las mejores condiciones.

Pongámonos en la piel de quien recibe este préstamo. Empecemos por el ejemplo más radical y alejado de nuestro país. Nos situamos a las afueras de Calcuta. Tienes unas pequeñas tierras donde plantas arroz y habitualmente tienes una interesante rentabilidad de las mismas, así como dos búfalos. Normalmente esa rentabilidad será muy similar año tras año puesto que tus tierras tiene una extensión determinada. Lamentablemente, este año el monzón no ha caído con la suficiente fuerza y toda tu plantación tiene que ser desechada. Si has leído el libro La Ciudad de la Alegría, probablemente sabrás que viene después: deberemos de acudir al usurero del pueblo, para que nos conceda un préstamo con unas condiciones extremas, por encima del 100% anual. Puesto que confías en que el próximo año podrás tener la rentabilidad habitual, el usurero está más que contento de ofrecerte el crédito, sabiendo que es la única alternativa. Sin embargo, debido a la sequía, fallecen tus dos búfalos y debes de pedir un nuevo crédito al usurero, en las mismas condiciones. Aunque seas capaz de conseguir una buena cosecha el siguiente año, la rentabilidad no alcanzará a pagar ambos créditos debido a sus intereses prohibitivos. Eventualmente, esta rueda en la que te encuentras atrapado, acabará haciéndote perder todo.

Otro ejemplo siguiendo en el mismo contexto: has tenido que desplazarte a Calcuta con tu familia y no tienes nada. Ahora mismo un negocio en auge es el taxi, sin embargo, no puedes permitirte las clases de conducir y trabajar como chófer debido a tu falta de recursos. Si recibieras un microcrédito, es seguro que encontrarías trabajo y podrías devolverlo sin problemas. Quién sabe, quizá tras unos años, con otro microcrédito, serías capaz de comprarte tu propio taxi, todo ello sin la necesidad de estar bajo el yugo de un usurero.

Estos ejemplos pueden parecer muy lejanos si hablamos de la India, pero se dan cada día en África, Latinoamérica o incluso en España. Las microfinanzas se tratan de un negocio que englobamos dentro de la inversión de impacto, debido a que no es solo una ayuda a pequeños emprendedores en todo el mundo, sino que se trata de un negocio. Cuando una plataforma de microfinanzas ofrece un crédito a un 6% o 7% de interés, para aquel que lo recibe, en comparación con las condiciones a las que debería de hacer frente o incluso ausencia de crédito, esto es toda una bendición. Asimismo, para aquel inversor que preste su dinero, una rentabilidad del 6% es espectacular. En muchos casos, a un riesgo relativamente bajo, si hablamos de alguien que necesita 5000€ para ampliar su plantación de café en Colombia, con amplia experiencia y conocimiento del terreno.

Gracias a la tecnología, estas startups son capaces, en muchos casos, de identificar qué individuos deben recibir el microcrédito, para no sufrir un sobreendeudamiento. Por tanto, no se entrega de forma indiscriminada, sino que busca hacerlo accesible mediante medios seguros y fiables a quien lo merece y no tiene acceso a los sistemas financieros debido a la exclusión de muchos lugares. Estos microcréditos, generan riqueza, ahorro y empleo, creando un impacto altísimo.

Os traemos tres startups que ofrecen microcréditos. Cada una a su estilo y usando su tecnología, haciéndolas únicas, pero con algo en común: crear un impacto positivo.

EthicHub

La apuesta por la tecnología de EthicHub es destacable. Se hacen valer del blockchain para optimizar la industria y romper las fronteras del dinero. De este modo, es capaz de generar un gran impacto social mediante los microcréditos, bajo la seguridad que ofrece el blockchain.

EthicHub busca resolver un gran problema: más de 2000 millones de personas no tienen acceso a cuentas bancarias. Una gran parte de ellos son agricultores. A pesar de tener una actividad muy rentable y bastante regular, no tienen acceso al crédito por vías tradicionales, como pueden ser entidades bancarias, viéndose obligados a pagar, como antes hemos comentados, tipos de intereses prohibitivos que pueden superar, con frecuencia, más del 100% anual.

Puesto que existen zonas donde hay exceso de liquidez, EthicHub conecta a aquellos que están interesados en obtener una buena rentabilidad y crear un gran impacto positivo para los inversores y, además, hacer reales los sueños y ambiciones de pequeños agricultores que dirigen un negocio rentable.

Gracias a la tecnología blockchain, estos microcréditos tienen la seguridad que ofrece un smart contract, puesto que para ambas partes, la confianza en el sistema es fundamental. De este modo, el riesgo de impago es ajeno a circunstancias técnicas y ofrece una transparencia que asegura el impacto positivo.

Microwd

Microwd no es una ONG, sino una empresa muy rentable que genera un impacto sensacional. Tiene el foco en Latinoamérica, donde conecta a mujeres emprendedoras con inversores que buscan generar un impacto social, sin descuidar la rentabilidad.

Tiene su origen en 2013, cuando su fundador Alejandro de León tuvo conocimiento de las ambiciones y sueños que tenían las madres de los alumnos del colegio al que fue a visitar en Nicaragua, donde había becado varios niños. El objetivo de Microwd no es hacer el mayor número de préstamos posibles, sino conectar a aquellas mujeres emprendedoras extraordinarias que nos encontramos en cada comunidad. A través de su aportación económica, estas mujeres se convierten en motores sociales, generando una gran rentabilidad del 7,3% desde su fundación. Actualmente, conceden casi 5000 créditos al año y han creado más de 10.000 empleos, aportando rentabilidad a más de 378 inversores.

Prevén ampliar sus productos hacia microseguros, hipotecas, planes de pensiones y fondos de ahorro. De este modo, su impacto será cada vez mayor. En su web puedes ver qué proyectos buscan financiación, así como maravillosas historias de éxito.

Oportunitas

El modelo de Oportunitas es algo distinto. Tiene una gran vocación social, permitiendo acceder a microcréditos a aquellos personas que quedan excluidas del sistema financiero, por falta de avales y garantías, promoviendo la inclusión financiera. No solo ofrecen microcréditos sociales, sino que, además, ofrecen formación y acompañan a sus usuarios en el proceso de desarrollo profesional y personal.

De este modo, no solo permiten que personas que buscan emprender, tengan acceso a un crédito para la vuelta a su vida y futuro, sino que además, mediante su formación online, aseguran ese futuro y les acompañan durante todo el proceso.

Su principal elemento diferenciador, además de la ya mencionada e interesante formación y acompañamiento, es que no solo tiene un impacto, sino que es sin ánimo de lucro. Oportunitas replica un modelo típico de IMF (Institución Microfinanciera), en el que una entidad sin ánimo de lucro, la Fundación, es a la vez partícipe e impulsora de una sociedad limitada, responsable de la actividad crediticia.

Al operar en España, Oportunitas tiene la misión de ser la primera institución española de microcréditos sociales que opera a nivel nacional.

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